A 33km del precioso pueblo azul de Chefchaouen se encuentra Akchour, al que debes acceder para realizar las dos rutas más famosas de la zona, El puente de Dios o Las cascadas, nosotros elegimos esta última, quedándonos pendiente la otra para tener excusa para volver.
Al llegar había multitud de niños ofreciéndose para hacer de guía, pero lo que no nos podíamos esperar que el nuestro sería tan especial. Un perro nos acompañó por toda la ruta e incluso donde dudábamos nos corregía.
El camino estaba lleno de pequeños locales preparados para refrescarte o comer, por supuesto, todo subido a pulso.
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